Al abrir la llave de la cocina, rápidamente se percibe el olor del gas que se utiliza como combustible, lo cual indica que las moléculas se trasladan hasta las fosas nasales. Este y muchos otros casos similares, nos permiten deducir que las moléculas de los gases están en continuo movimiento de traslación.
Aplicando la teoría cinético molecular se puede formular el siguiente modelo para los gases:
- Las moléculas están en continuo movimiento de traslación rectilínea y de rotación sobre su eje.
- Las fuerzas de cohesión son muy débiles y, por lo tanto, las moléculas están independiente unas de otras y se separan fácilmente, ocupando un volumen cada vez mayor. Esto se llama expansibilidad.
- En el caso de que un gas está encerrado en un recipiente, las moléculas en su movimiento chocan entre sí y contra las paredes, originando una presión.
- Si el recipiente presenta pequeños poros, algunas moléculas escapan por ellos, lo cual se denomina efusibilidad.
- Si se ponen en contacto dos gases, las moléculas de un se mezclan rápidamente con las del otro y viceversa. Este fenómeno recibe el nombre de difusión.